Muchas personas presentan desgastes de los dientes y manifiestan apretar los dientes durante la noche e incluso durante el dia, el diagnóstico de bruxismo debe ser realizado mediante un exámen minucioso de músculos de la masticación, dientes y la articulación temporomandibular. La utilización de planos de relajación para diagnóstico y disminución del dolor es la primera medida que utilizamos, tambien aplicamos el Botox (toxina Botulímica) como tratamiento en los músculos comprometidos y la aplicación de Plasma rico en factores de crecimiento y ácido hialurónico para la desinflamación y lubricación de la articulación mandibular.
La falta de dientes, la malposición de la mandibula, la malposición de los maxilares y la consecuente inestabilidad de la mordida, puede generar dolores faciales y articulares que se manifiestan como dolores irradiados en nuestro territorio maxilofacial.
Para realizar un diagnòstico claro es necesario realizar un exámen clínico y de imágenes que debemos interpretar junto al radiólogo para establecer un plan de tratamiento que incluya la reconstrucción de una mordida estable, reposicionar la articulación de la mandíbula a un lugar adecuado y muchas veces corregir la posición postural del cuello para dar una solución integral al paciente. Los resultados de este tipo de tratamientos integrales resultan en una disminución de dolores atípicos, mejora en la posición postural y mejora en la función respiratoria y, por supuesto, una recuperación de la función y la estética cuando se logra reconstruir adecuadamente una sonrisa.